Palabra para meditar: “Toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir y para instruir en la justicia, a fin de que el siervo de Dios esté enteramente capacitado para toda buena obra.” 2° Timoteo 3.16
Reflexión: La afirmación del apóstol Pablo a Timoteo es una de sus rotundas enseñanzas sobre los valores de las Escrituras. Porque no contienen solo promesas cálidas sino también instrucciones necesarias para transformarnos en obreros del reino de Dios.