Palabra para meditar: “Ya no hay judío ni griego, esclavo ni libre, hombre ni mujer, sino que todos ustedes son uno solo en Cristo Jesús”. Gálatas 3.28
Reflexión: Sólo Dios puede unir a los hombres. Lo hizo en Jesús. Y puede seguir haciéndolo hoy cuando nuestro mundo está dividido con toda clase de grietas y odios.