LOS BRAZOS ABIERTOS DE DIOS
Palabra para meditar: “¡Vengan a las aguas todos los que tengan sed!... Escúchenme bien y comerán lo que es bueno… Presten atención y vengan a mí, escúchenme y vivirán. Haré con ustedes un pacto eterno…” Isaías 55,1-3
Reflexión: Desde el Antiguo Testamento resuena el ofrecimiento para calmar las necesidades básicas. El Dios del pacto y la provisión sigue ofreciendo una vida completa con él.