Palabra para meditar: “¿Quién acusará a los que Dios ha escogido? Dios es el que justifica. ¿Quién condenará? Cristo es el que murió, e incluso resucitó y está a la derecha de Dios e intercede por nosotros.” Romanos 8. 33,34
Reflexión: Prestemos atención: también Jesús intercede por nosotros. Desde su trono celestial, el Rey de reyes y Señor de señores que nos ha justificado está pendiente de que lo sigamos con fidelidad.