Palabra para meditar: “Dedíquense a la oración; perseveren en ella con agradecimiento y, al mismo tiempo, intercedan por nosotros a fin de que Dios nos abra las puertas para proclamar la palabra.” Colosenses 4.2-3
Reflexión: La iglesia intercesora acompañaba al apóstol Pablo en los peores momentos. El apóstol Pablo los animaba a la perseverancia en la oración. YO TAMBIÉN SOY INTERCESOR.