Palabra para meditar: “Vienen días –afirma el Señor omnipotente-, en que enviaré hambre al país; no será hambre de pan ni sed de agua, sino hambre de oír las palabras del Señor.” Amós 8.11
Reflexión: ¡Cómo quisiéramos ver que se haga realidad esta palabra profética! La iglesia debe recibirla estando dispuesta a descubrir y atender a los hambrientos de Dios.