Palabra para meditar: “Que Dios mismo, el Dios de paz, los santifique por completo, y conserve todo su ser –espíritu, alma y cuerpo- irreprochable para la venida de nuestro Señor Jesucristo.” 1 Tesalonicenses 5.23
Reflexión: Bendición del apóstol Pablo, que cubre toda nuestra persona para la vida que el Señor quiere que vivamos.