Para comenzar estos 40 días de consagración separa un cuaderno, o abre una “nota” nueva en tu celular que te sirva como tu diario del ayuno.
Allí puedes tomar nota de tus oraciones, tus peticiones, aquellas áreas en las que deseas crecer en tu comunión con Dios, tus objetivos;
Y sobre todo toma nota de las palabras rhema que Dios te va dando en estos días, las
revelaciones que vas a ir recibiendo, los versículos que destaques de tu lectura diaria de la palabra, incluso imágenes, personas e ideas que vengan a tu corazón en los tiempos de oración. Al terminar el ayuno te sorprenderás de todo lo que Dios te dijo en este tiempo y de cómo Él ha te ha revelado su corazón.
En este primer día, al ver las páginas en blanco de tu cuaderno, llénate de expectativa de lo que viene por delante y ora: ¡Señor, estoy ayunando
para darte todo el honor que solo Tú mereces, y con expectativa aguardo la manifestación de tu gloria en estos 40 días!
Una canción para cantar: Eres Digno de adorar: